|| Todas mis amigas ||
|| Bilogía Todas mis amigas #1 ||
|| Susana Rubio ||
|| Ficción adulto joven ||
Luna es alocada, divertida y la más graciosa, pero no siempre es así. ¿Quieres saber por qué?
Penélope vive con su novio, y su vida ordenada es un poco aburrida ¿O quizá no tanto como parece?
Edith es seria, responsable y pragmática, tanto que nunca se deja llevar, o casi nunca...
¿Y Noa? Noa no soporta a los hombres, pero al mismo tiempo va a perder el norte por uno: ÉL.
Cuatro maneras de ver el mundo que se complementan para crear un universo propio donde el amor y la amistad podrán con todo. O con casi todo...
Es muy interesante la premisa de este libro, me sentí 100% identificada con Noa, y no porque no odie a los hombres, sino porque me encuentro escribiendo un trabajo similar, pero para apenas terminar la carrera jajajajaja que ella está haciendo un master ya. En esta primera entrega de la bilogía conoceremos a las 4 amigas Luna, Edith y Penélope a las que se intento poner opuestas pero es que la verdad tienen cosas muy similares y si me llegó a desesperar un poco el "soy única y diferente".
Cada chica tiene su historia ¡y que historias!
Luna es la más mayor de la chicas, y puso en pausa su vida académica de abogada por problemas de salud, padece de ansiedad y acude al psicólogo, tanto así que incluso requiere de medicación, sin duda una de las más frágiles a pesar de tener una apariencia fuerte, ha conservado un trabajo que no le genera tanto estrés como la abogacía y que mantiene a sus padres contentos, Luna sacrifica mucho por conservar la tranquilidad de sus padres y la verdad me ponía triste verla así.
La verdad Penélope me apenaba, su relación de años la denigraba a otro nivel, y no creo que se trate de la confianza generada con el tiempo sino que más bien ella compensaba tanto a todos que se olvidaba de ella, tiene un trabajo donde no se lleva tan bien con uno de sus compañeros de trabajo que la verdad me tenía más entretenida que saber del hombre con el que vive.
Edith la verdad no me agradaba, era "tan fría" y trataba de convencerme tanto de que le valía todo respecto al romanticismo, que es la que peor me calló la verdad. Ella es una niña invitro, porque su madre, que es dueña del bufete de abogados en el que Edith labora, dice que cuando quiso ser madre, no iba a esperar por el hombre indicado, porque si no se iba aquedar esperando, por lo que decidió someterse a un tratamiento de fertilidad.
Y Noa, quien vive con sus padres y los señores son lo mejor, no me pudieron caer mejor, siempre apoyando a su hija, e incluso siendo amigos de las amigas sin pasar esa línea de ser padres de Noa, la verdad llegó un momento en el que esperaba por los capítulos de ella porque me encantaba el rumbo que estaba tomando su historia.
La verdad es un tocho de libro, me costó también, creo que todo se pudo haber resuelto en la mitad de las páginas, pero sin duda, ese final me dejó con ganas de mucho, mucho más. Y si continué con esta bilogía para que digo que no, si si.
